Hay gente muy altruista y fanática del punto de cruz que se empeña en hacer nuestros paseos por las calles mucho más agradables. En esta ocasión se ha visto en una calle de Milán (Italia) unos Pacman bordados en una puerta de rejilla.
La verdad que no podemos más que esbozar una sonrisa y agradecer en silencio aquel o aquella artista del punto de cruz que nos ofrece esta muestra callejera de su arte. Gracias XXXX